La fuerza de la naturaleza se ha dejado notar en el caserío La Isla, del cantón San Jacinto, en San Miguel, y es que las fuertes lluvias que han azotado las últimas horas la zona oriental del país ocasionaron que el Río Grande se desbordara y provocara la destrucción de cuatro viviendas.
Las paredes de adobe cedieron a la fuerte creciente y terminaron por derrumbarse por fortuna las familias resultaron ilesas, se contabilizan alrededor de 19 personas afectadas entre niños y adultos quienes hasta el momento no han sido albergados, ya que han optado por resguardarse en las viviendas de los vecinos y familiares que representan mayor seguridad.
El panorama de desastre dejado por el desbordamiento del Río Grande es evidente y los habitantes se han unido para retirar los escombros y árboles caídos; así mismo, Protección Civil y la PNC se han hecho presentes para verificar y mantenerse alertas.