¿Quién dijo que ser madre o tener un bebé es sinónimo de retiro? Ruth Ruano, futbolista del club Sporting Son Ferrer de España, centró, sin querer, la atención del mundo deportivo luego de pedir licencia en un partido de entrenamiento para retirarse a las gradas y amamantar a su hija recién nacida.

El hecho ha sido ampliamente saludado entre dirigentes, jugadores e hinchas pues contribuye a romper con los estereotipos acerca del rol femenino en el deporte rey.

Ruth Ruano es una jugadora de la Liga Autonómica de Mallorca que reparte su tiempo entre los estudios, el fútbol y el cuidado de la pequeña Julia, su segunda hija de tan solo algunos meses de vida.

La fotografía fue captada por un anónimo admirador desde una tribuna adyacente, quien luego de advertir que la atacante se retiraba a un lado del campo con la venia de su entrenador para darle pecho a su hija, decidió inmortalizar la escena y compartirla en redes sociales la fotografía, la cual rápidamente se viralizó debido al enorme y significado que los diferentes usuarios alrededor del mundo le dieron a la imagen.

“Con planificación y ganas todo se puede. Es pasión lo que siento por este deporte, todo el mundo puede hacerlo, compagino estudios, trabajo y maternidad con mis pasiones”, dijo la entusiasmada madre.

Pero el fútbol no es algo nuevo en la familia Ruano, pues la pareja de la ejemplar madre también es futbolista. “Él juega al fútbol, es una pasión que nos une a los dos y también se la queremos transmitir a nuestros hijos. En casa jugamos todos”, indicó.

Las compañeras de equipo de Ruth, al igual que su cuerpo técnico y los hinchas que llegan a conocer su caso apoyan a la deportista en cada uno de los entrenamientos que va con su nena, defendiendo así el lema del equipo: “Uun club diferente para los que quieren aprender disfrutando”.

Pero el tema va mucho más allá, pues a raíz de la viralización de la imagen en España se ha abierto el debate de si es necesario acondicionar salas de lactancia para jugadoras, dirigentes y aficionadas en los estadios; aunque para Ruth, no parece ser mayor molestia el tener que visitar de cuando en cuando el banquillo para darle amor a su retoño.

“Es lo mejor para el bebé e incluso para la madre, y no es para nada contradictorio con seguir haciendo la misma vida, ya sea jugar al futbol. En un futuro muy cercano me da la impresión de que seremos muchas mamás amamantando a nuestros bebés en los descansos de los partidos”, puntualizó.