Tras la ejecución de un plan de prevención que ayudó a minimizar los efectos de la tormenta tropical Julia, que tocó territorio salvadoreño a mediados de octubre, el Gobierno del presidente Nayib Bukele inició acciones inmediatas para mitigar los daños registrados en cinco sectores: infraestructura, agricultura y ganadería, turismo, vivienda y área productiva. 

En conferencia de prensa, el Gabinete de Economía, integrado por la ministra de Economía, María Luisa Hayem; el ministro de Hacienda, Alejandro Zelaya; el titular de Agricultura, Enrique Parada, y el ministro de Obras Públicas, Romeo Rodríguez, detalló los puntos de intervención desde cada cartera.

 Según el ministro Zelaya, la inversión que ha destinado la administración Bukele para toda la rehabilitación y reconstrucción tras la tormenta asciende a alrededor de $116 millones, de los cuales $98.2 millones se ejecutarán este año y lo restante el próximo. 

«La afectación ha sido amplia, pero el país cuenta con mecanismos de contingencia», indicó Zelaya. Para el sector de agricultura, ganadería y pesca, el Gobierno ha acordado designar $26.9 millones. 

Sin embargo, de ese total, en 2022 solo se utilizarán $9 millones para la restitución de cosechas y para la entrega de paquetes de semilla mejorada, paquetes alimentarios e insumos para proteger los cultivos. 

El resto de la inversión se ejecutará en 2023. Al respecto, el ministro Parada explicó que la inversión ha sido determinada en función de la contabilización de daños que hizo la cartera de Estado y abarca desde la restitución de cabezas de ganado hasta la recuperación de manzanas de cultivo de café, maíz, arroz y frutas. 

Por otro lado, Vivienda recibirá $8.1 millones en fondos para la entrega de paquetes alimentarios a las personas afectadas en los albergues, mientras que el sector turístico tendrá a su disposición $500,000 para las distintas afectaciones en el país.

Los dos rubros que recibirán más capital para la atención del desastre en este año son infraestructura y productividad; el primero, con $70 millones que se utilizarán este año para la intervención de zonas dañadas; para el segundo se cuenta con la aprobación de $10 millones en créditos para empresarios y productores, los cuales se entregarán por medio del Banco de Desarrollo de El Salvador (Bandesal).