Un policía de la ciudad de University Place (Washington, EE.UU.) optó por una inusual táctica para atrapar a unos ladrones: ladrar como un perro.

El hecho ocurrió el pasado 18 de agosto, cuando varios agentes respondieron al robo de un coche por parte de un grupo de adolescentes. Durante la persecución, un agente lanzó una tira de púas sobre la calle. Si bien el vehículo sufrió varios pinchazos, logró pasar por la trampa, de manera que los sospechosos no se detuvieron y continuaron su huida.

Más tarde los oficiales hallaron el auto. Aunque estaba vacío, seguía encendido, lo que hizo suponer que los prófugos no se encontraban muy lejos. Luego de rodear el área, uno de los policías detectó a los jóvenes en una zona boscosa, cerca de un arroyo. El uniformado les exigió que se detuvieran y amenazó con soltar un perro policía, luego de lo cual comenzó a imitar con su voz el ladrido de un can.

Después de varios 'ladridos', los cuatro menores decidieron salir de su escondite y se rindieron. "Los chicos realmente creyeron que había un perro y, al final, les dijeron a los agentes: 'Hombre, tan pronto como escuché a ese perro, nos rendimos'", contó el sargento Darren Moss, quien elogió a sus hombres por su creatividad.