Un equipo de investigaciones global ha desactivado la infraestructura de Emotet, que se considera el malware más peligroso del mundo capaz de robar contraseñas e instalar software malicioso de forma remota, dijo el miércoles la Oficina Federal de Policía Criminal de Alemania.

La operación se llevó a cabo el martes como parte de una campaña internacional con investigadores de los Países Bajos, Ucrania, Lituania, Francia, Inglaterra, Canadá y Estados Unidos y coordinada por las autoridades policiales europeas, dijo la policía en un comunicado.

Se cree que Emotet, que puede robar contraseñas e instalar programas controlados de forma remota, incluido el ransomware, se ha utilizado en varios ataques organizados, incluidos los intentos de infiltrarse en la compañía petrolera más grande del mundo, Saudi Aramco, y de manipular la campaña presidencial estadounidense de 2020.

Solo en Alemania, los ataques con el malware Emotet a personas e instituciones, incluido el Tribunal de Justicia de Berlín, causaron daños de al menos 14,5 millones de euros (17,55 millones de dólares), dijo la policía.