Dos días después de que el obispo de Apartadó, monseñor Hugo Alberto Torres Marín, le pidiera al Estado Mayor del ‘clan del Golfo’ un "acto de buena voluntad" para ponerle fin al paro armado, en las últimas horas informó que este había llegado a su final.

Lo hizo a través de un video en el que reporta que así como las familias del Urabá antioqueño y chocoano se confinaron desde el pasado jueves por un comunicado emitido por este grupo al margen de la ley, de la misma manera podían retornar a sus actividades.

“Amigos del Urabá Darién, si por un comunicado nos acogimos a una orden de paro, por otro comunicado, de iguales características, acogemos la noticia del fin del paro (...) Agradecemos gestos generosos de paz”, dijo el religioso.

Pese a este anuncio, algunos comerciantes de la región se han abstenido de abrir sus establecimientos.

El paro los tiene sin gas natural

Dadas las condiciones de orden público que se han presentado en el departamento, EPM informó que en 12 municipios antioqueños no ha podido transportar el gas natural. Esta situación tiene afectados a 80.418 usuarios.

En la subregión del Urabá antioqueño los usuarios sin el energético están ubicados en  Apartadó (22,516 clientes), Arboletes (2966 clientes), Carepa (8255 clientes), Chigorodó (11,874 clientes), Mutatá (1103), Necoclí (2376 clientes), Turbo (18,065 clientes), San Juan de Urabá (1745 clientes) y San Pedro de Urabá (2794 clientes).

En Urrao, Remedios y Frontino también se presenta desabastecimiento. En los tres municipios son 8724 los usuarios afectados.

EPM indició que monitorea con las autoridades del departamento las condiciones de las vías para transportar el energético a cada uno de estos municipios.