MUEREN 18 INTEGRANTES DE UNA MISMA FAMILIA TRAS LA ERUPCIÓN DEL VOLCÁN DE FUEGO EN GUATEMALA

Las autoridades declararon tres días de duelo y los datos reflejan más de 2,000 personas en albergues, 3,200 evacuados de las zonas aledañas al coloso y más de un millón de afectados, sobre todo en los departamentos de Escuintla, Sacatepéquez y Chimaltenango.

MUEREN 18 INTEGRANTES DE UNA MISMA FAMILIA TRAS LA ERUPCIÓN DEL VOLCÁN DE FUEGO EN GUATEMALA

"Siento que no me puedo sostener en pie. Nunca había sentido un dolor tan grande en mi corazón”, relató un miembro de la familia Pamal. La lava destruyó todo a su paso y una comunidad entera de Escuintla, aledaña al volcán, fue devastada. Los cuerpos de socorro aún trabajan en el lugar para tratar de encontrar sobrevivientes o fallecidos. 

Era hora del almuerzo y los miembros de la familia Pamal se encontraban en sus viviendas como lo hacen todos los domingos, cuando se reúnen a comer en San Miguel Olotes en la aldea El Rodeo, en Escuintla. Mientras almorzaban, Camilo Antonio Galicia Pamal, que es pastor evangélico del sector, se había ido a la iglesia con su esposa, Zenaida García, a participar en un servicio religioso.

A las 2:00 de la tarde, un fuerte estruendo hizo salir a varias familias de sus viviendas. El volcán de Fuego habían hecho erupción, pero no todos los vecinos tuvieron tiempo de abandonar sus hogares y una fuerte correntada de ceniza, arena y lodo que venía desde la montaña dejó sepultadas decenas de casas, muchas de ellas construidas de madera y lamina. 

Entre quienes perecieron bajo las cenizas están los 18 miembros de la familia Pamal. La víctima más pequeña tenía seis años y el mayor 70. También quienes estaban en la iglesia junto a la miembros de la familia Pamal murieron tras la erupción. 

Las casas de la familia Pamal y la capilla se encontraban en la parte más alta de la comunidad y fueron las primeras construcciones en ser alcanzadas por el material volcánico que destruyó todo a su paso. 

En la zona se observa total destrucción y, cuando se alza la mirada, lo único que se puede ver son casas destruidas y vehículos quemados. La comunidad ya no existe, San Miguel Olotes fue prácticamente borrado del mapa por las correntadas de lava. 

Son imágenes dantescas, imágenes que quedarán para siempre en la memoria de quienes les tocó vivir un día trágico. Incluso, en el lugar se pueden observar zapatos y ropa de niños, además de electrodomésticos destruidos. 

Durante años el volcán de Fuego ha estado activo y los habitantes cercanos al lugar han aprendido a convivir con ello, pero esta vez el gigante expulsó lava, piedras y arena que cayeron directamente sobre la comunidad que tenía más de 45 años de estar asentada en el lugar. 

El Comando Unificado de Rescate integrado por varias instituciones de socorro han trabajado por varias horas y en sus rostros se puede observar el cansancio, pero están dispuestos a seguir ayudando en las tareas que se les requiera. 

A ellos también se han unido rescatistas de varios países, entre ellos, de El Salvador y México. 

En la morgue
Este lunes y martes, después de la tragedia que ha dejado al menos 69 muertos en las zonas aledañas del volcán, se vivían escenas de dolor en la morgue provisional que fue instalada en la escuela oficial intercultural de la colonia Hunapu de Escuintla a unas 31 millas (50 km) de la capital de Guatemala y a 7.5 millas (12 km) de donde ocurrió la tragedia. 

En un ir y venir, mucha gente trataba de obtener información, mientras personal del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF), trabaja en el reconocimiento de los cadáveres, una labor bastante complicada, debido a que muchos de los fallecidos están completamente quemados. 

Allí se podía observar a muchas personas preguntando por sus familiares, incluso, algunos tuvieron que sacarse sangre para realizarle pruebas de ADN a los fallecidos y poder identificarlos. 

Hasta esa morgue llegó Marco Antonio Galicia Pamal para preguntar por su hermano y allí le dieron la mala noticia: él era uno de los más de 50 fallecidos en San Miguel Olotes, donde además murieron otros 17 familiares suyos. 

“ Me vine hasta aquí para enterarme que casi toda mi familia había fallecido. Siento que no me puedo sostener en pie. Nunca había sentido un dolor tan grande en mi corazón”, le relata a Univision Noticias. 

Su hermano era el pastor Camilo que falleció en la iglesia junto a su esposa, cinco de sus hijos y cuatro nietos. Algo que le marcará por el resto de su vida. 

Fabian Galicia Pamal, hermano de Camilo y Marco Antonio, también vive en el sector en donde ocurrió la tragedia, pero él sí pudo salir y ponerse en resguardo: “Yo me encontraba en mi casa con mis hijos y mis nietos. Les dije: ' Salgamos porque esto está duro y sacamos solo lo necesario para irnos. Vimos una nube de ceniza que ya estaba sobre las casas. Al vernos, nosotros estábamos todos sucios, pero logramos ponernos a salvo'”, relata Fabian, que no puede contener el llanto. 

Junto a ellos también se encontraba en la morgue Irma Pamal, hija de Camilo. Ella es quien menos puede relatar lo sucedido y desde la noche del domingo ha estado tomando tranquilizantes. 

“Yo estaba en mi casa cuando sucedió todo, logre salir con varios de mis familiares, pero los de otras casas, ya no pudieron”, recordó. 

Irma perdió no solo a su padre, también a cinco hermanos y varios familiares. Otros hermanos de ella que viven en Estados Unidos llegarán en las próximas horas a Guatemala. 

La mayoría de familia se dedica a la agricultura, manejo de transporte pesado y albañilería. 

Para el entierro tendrán el apoyo de las autoridades, además que vecinos de otros municipios aledaños prometieron brindarles ayuda. 

La familia Pamal es una de las muchas que pasa por momentos difíciles en Guatemala, es una tragedia que ha enlutado al país entero. Al igual que ellos, otros grupos familiares murieron también el sector de San Miguel de los Olotes. 

Las autoridades declararon tres días de duelo y los datos reflejan más de 2,000 personas en albergues, 3,200 evacuados de las zonas aledañas al coloso y más de un millón de afectados, sobre todo en los departamentos de Escuintla, Sacatepéquez y Chimaltenango.

MUEREN 18 INTEGRANTES DE UNA MISMA FAMILIA TRAS LA ERUPCIÓN DEL VOLCÁN DE FUEGO EN GUATEMALA