El 2020 fue un año complicado para los Estados Unidos de América (EUA) y no únicamente por la pandemia del coronavirus COVID-19, sino también por la cantidad de asesinatos que subió un 30% durante ese año.
Según el director del Buró Federal de Investigaciones (en inglés, Federal Bureau of Investigation, FBI), Christopher Wray, citado por la agencia AP, el incremento del 30% se consideró en relación a cifras de 2019, antes que el mundo sucumbiera ante la pandemia.
Los asesinatos y muertes intencionales ascendieron aproximadamente el 29,4%, lo que representa a 21,570 personas, un incremento de 4,901 con respecto a 2019, dijo el FBI.
Autoridades indicaron que se trata del total estimado más elevado desde principios de la década de 1990, cuando la cifra de homicidios permaneció por encima de los 23,000 al año en un momento en que se libraban disputas por drogas en muchas partes del país.
De acuerdo con el criminólogo de la Universidad Northeastern en Boston, James Alan Fox, 2020 fue una “situación única” y no parte de una tendencia a largo plazo, pues atribuyó el aumento, además de la pandemia, a conflictos políticos, raciales y al hecho que por las cuarentenas las personas simplemente tenían mucho tiempo libre.
Pese a las altas cifras, el experto consideró que esto no será una tendencia, sino que algo atípico en un año muy complicado.