Todavía existen al menos tres caminos legales que se pueden proponer para salvar de la deportación a la comunidad amparada con el Estatus de Protección Temporal (TPS, en inglés) en Estados Unidos, aunque la conversación entre ambas partes del caso Ramos vs. Mayorkas se haya suspendido, de acuerdo al director ejecutivo de Alianza Américas, Óscar Chacón.

Para Chacón esto no implica que la población «haga sus maletas» antes del 31 de diciembre -cuando termina la extensión automática para los permisos de trabajo- sino «empujar» a la administración de Joe Biden con la intención de que declare de forma inmediata una medida de protección a partir del 1º de enero de 2023.

Entre los posibles escenarios se encuentra la declaración de la Salida Forzosa Diferida (DED, en inglés), una alternativa que ya ha sido aplicada para la comunidad salvadoreña cuando la Ley de Inmigración designó al país el primer TPS por 18 meses, de enero de 1991 al 30 de junio de 1992. Este TPS no fue renovado y en junio de 1992, el entonces presidente republicano George H. W. Bush ordenó que se retrasara la deportación de las personas hasta el 30 de junio de 1993. Llegada esa fecha, el expresidente Bill Clinton concedió una nueva prórroga hasta el 31 de diciembre de 1994.

Otra alternativa es que el Gobierno federal reasigne un nuevo TPS, incluso, con dos modalidades: otorgarlo a quienes ya han gozado de este beneficio y otra «versión muy generosa»: siempre proteger a los que ya lo tenía y dar la oportunidad de solicitarlo a nuevas personas. «Perfectamente realizable si existe la voluntad política» en Estados Unidos, manifestó.

La tercera opción es que el Gobierno revoque la cancelación del TPS hecha por su antecesor Donald Trump y anuncie una protección de 18 meses a partir de enero del próximo año.

El TPS es un programa que está estipulado en la ley migratoria y que es de la rama Ejecutiva la que, por ende, puede conceder el tiempo que crea conveniente.

Además, los criterios de otorgación son bastantes amplios, señaló Chacón.  «Creo que vamos a tener éxito generando otras formas de protección que le den tranquilidad a los personas con TPS», afirmó el director, luego de que las negociaciones llegaran a su fin el miércoles.

Esperanza

Los líderes de organismos inmigrantes en Estados Unidos señalan que es poco probable que se llegue a la deportación de más de 200,000 personas; pero ya se encuentran organizando para presionar al presidente Joe Biden y que  emita lo antes posible una orden ejecutiva que salva la vida y los permisos de trabajo de los tepesianos antes del 31 de diciembre.