El jefe de la diplomacia estadounidense para América Latina, Brian Nichols, manifestó este martes su “extrema preocupación” por la ola de violencia e inseguridad que azota a Ecuador, donde se han registrado secuestros, explosiones y fugas de presos vinculados al narcotráfico.
“Los Estados Unidos apoya al pueblo de Ecuador. Estamos listos para brindar asistencia al gobierno ecuatoriano y permaneceremos en estrecho contacto con el equipo del Presidente Daniel Noboa respecto a nuestro apoyo”, escribió Nichols en su cuenta de X.
El funcionario estadounidense se refirió así a la crisis que vive el país andino desde la fuga de una cárcel de máxima seguridad de Adolfo Macías, alias “Fito”, líder de la banda criminal Los Choneros, que tiene nexos con el cartel mexicano Jalisco Nueva Generación.
Desde entonces, se han producido motines en varias cárceles, donde los reos han retenido a guardias penitenciarios, y también se han reportado ataques armados a un canal de televisión, una universidad y varios vehículos en distintas ciudades.
El presidente Noboa, quien asumió el poder el pasado 23 de noviembre tras ganar unas elecciones anticipadas, decretó el estado de excepción y el toque de queda en todo el territorio nacional, y movilizó a las fuerzas armadas y policiales para restablecer el orden.
El decreto fue dado a conocer luego de que hombres armados y encapuchados entraron al canal TC Televisión en Guayaquil (suroeste) cuando periodistas transmitían en vivo un noticiero, lo que provocó una dramática situación que se extendió al menos por 30 minutos hasta que intervino la policía.
Un periodista de TC envió mensajes por WhatsApp a un reportero de la agencia de noticias AFP indicando: “Por favor. Entraron a matarnos. Dios permita que esto no ocurra. Están al aire los delincuentes”.
La policía afirmó después que puso fin a la toma del canal y que detuvo a 13 personas.
En marzo, cinco sobres con pendrives cargados con explosivos fueron enviados a periodistas de varios medios, uno de los cuales resultó con heridas leves tras la detonación.
En el norte de la capital, varios individuos dispararon a los vehículos que pasaban cerca de ellos, lo que causó la muerte de cinco personas y heridas a una estudiante de un colegio de la zona. Cerca de allí, un grupo armado irrumpió en un almacén de repuestos y asesinó a tres personas.
En medio del estallido que se hizo sentir en varias ciudades como en Quito, siete policías fueron secuestrados, hubo explosiones contra una estación policial y frente a la vivienda del presidente de la suprema Corte de Justicia y vehículos incendiados.
En cárceles de cinco localidades además están 139 guardias y funcionarios administrativos retenidos por presos, señaló el organismo a cargo de las prisiones (SNAI).
Ubicado en medio de Colombia y Perú, los mayores productores mundiales de cocaína, Ecuador pasó de ser una isla de paz a un fortín de guerra del narco. El 2023 cerró con más de 7.800 homicidios y 220 toneladas de droga incautadas, nuevos récords en la nación de 17 millones de habitantes.