Ante la decisión de La Sala de lo Constitucional, la embajada de La República Popular China, reitero atreves de un comunicado las buenas intenciones que su país tiene para El Salvador, haciendo del conocimiento de  todos los salvadoreños que las empresas chinas están sumamente motivadas a participar en las cooperaciones entre ambos  países,  ya que poseen un gran potencial y amplias perspectivas.

La carta reza lo siguiente:

En el mundo hay una sola China, Taiwán forma parte inalienable del territorio chino, el Gobierno de la República Popular China es el único representante legítimo de toda China. Así se ratificó el Principio de una sola China con la aprobación de la Resolución 2758 de la Asamblea General de las Naciones Unidas en octubre de 1971. En la actualidad, El Salvador y otros 177 países reconocen a la República Popular China, sólo 17 países mantienen “relaciones diplomáticas” con la llamada República de China Taiwán.

A la luz del Principio de una Sola China, Taiwán, que no es un Estado soberano, no puede participar en la Organización Mundial de Comercial sino bajo el nombre el Territorio Aduanero Distinto de Taiwán, Penghu, Kinmen y Matsu o “Taipei Chino”.

Adherirse al Principio de una sola China es la premisa fundamental y la base política para que China establezca y desarrolle relaciones con cualquier país. Conforme al Derecho Internacional, al establecer enlaces diplomáticos con China, la Parte salvadoreña tiene la ineludible responsabilidad política y jurídica de anular todos los documentos oficiales firmados con Taiwán. Al respecto, la Parte china tiene la buena predisposición de hacer arreglos especiales para ayudar a reparar las pérdidas que pueda sufrir la Parte salvadoreña.

Con las relaciones diplomáticas de China con El Salvador, las empresas chinas están sumamente motivadas a participar en las cooperaciones entre nuestros países, que tienen un gran potencial y amplias perspectivas.