En un caserío del municipio de Arambala, en el oriental departamento de Morazán, una familia resultó afectada por un alud de tierra que cayó sobre su humilde vivienda a consecuencia de las lluvias que han afectado a buena parte del territorio nacional. Agentes llegaron hasta ese lugar y al ver las condiciones en que se encontraban les brindaron ayuda humanitaria.

La familia reside en el caserío Mazala, del municipio ya mencionado, a pesar de haber perdido sus pertenencias, se resistieron a abandonar su humilde hogar e irse a un albergue, tal y como se lo pidieron los policías, quienes dieron primeros auxilios a las personas que habrían sufrido lesiones leves.

"En un gesto de solidaridad con los que pasan por momentos difíciles, los uniformados llevaron una colchoneta, a fin de mitigar un poco las necesidades de estas personas afectadas por el derrumbe sobre la vivienda provocadas por las persistentes lluvias que azotaron al país desde el pasado fin de semana" dijo un gente de la de la PNC.

La Policía Nacional Civil (PNC), se mantiene en situación de alerta, pese a que la lluvia ya cesó, con el fin de brindar seguridad, acompañamiento y ayuda a familias que han perdido viviendas, alimentos, animales, ropa y otros enseres, como en el caso de este personal que llegó durante un patrullaje en horas nocturnas hasta el caserío.