Miguel Ángel Pérez Deodanes fue declarado culpable de haber cometido cuatro homicidios, por lo que el Juzgado Especializado de Sentencia "C" de San Salvador lo condenó a 90 años de prisión.
El pandillero, de 23 años, participó en las muertes de los hermanos José Adrián y Jorge, ambos de apellidos Guevara Aguilar, por creer que eran delincuentes rivales.
También asesinó a Antonio Pérez Ramírez porque la estructura criminal a la que pertenece tenía información de que era custodio de Centros Penales. Además, a Santiago Pascual le quitó la vida por rencillas personales.
Los crímenes fueron cometidos en el municipio de Panchimalco, al sur de la capital, entre 2010 y 2016.
El 18 de junio pasado, a Pérez Deodanes le fue impuesta otra condena de 33 años de prisión por los delitos de homicidio agravado, en perjuicio de Alcides Antonio Pérez Ramos, y agrupaciones ilícitas.