Por: Warner Velásquez

El estira y encoge de los diputados de la Asamblea Legislativa y el presidente de la República, Nayib Bukele, deja sin una ley a la poblacion para combatir a la pandemia del covid-19.

El Salvador será el primer país del mundo que por diferencias políticas expone a la poblacion a un contagio masivo.

El lunes, la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) dejó sin efecto la prórroga del estado de emergencia señalando una usurpación de poderes del Ejecutivo que ignoró al Legislativo para la decisión.

Este martes vence la denominada ley de cuarentena que le daba poderes de represión al Ejecutivo para que se endurecieran las medidas y mantener en encierro a la poblacion.

Los parlamentarios aprobaron una ley que reactiva la economía en un plazo de 120 días, pero al carecer de medidas que restringen la circulación Bukele anunció que la vetará.

El mandatario también señaló que se va a tomar su tiempo para regresar el veto a la Asamblea y que este sea superado para que la CSJ decida si entra en vigencia o no.

En tanto, ¿Cómo queda el país?

Aunque en la constitución de la República señala que el veto debe regresar a la Asamblea en ocho días, la actual administración se ha tardado más en hacerlo.

De hecho, el veto sobre un seguro de vida al personal de salud tardó 15 días en regresar y casi tres semanas en que la Sala de lo Constitucional señalara que entraba en vigencia.
 
Tomando como referencia este caso se estima que Bukele estaría firmando el documento vetado a finales de mayo. En un tiempo parecido al que esperaba se le aprobara la prórroga.

La Asamblea ya demostró que va a superar el veto, pero esto tiene que ser ratificado para que el órgano judicial conozca el caso y emita una decisión. Algo que puede tardar tres semanas más, es decir a mediados de junio.
 
Mientras se decide, el país regresaría abruptamente a la normalidad ya que son pocas las regulaciones que Bukele podría tomar decretando una alerta roja.

Las empresas podrían trabajar sin restricciones y despedir a empleados que no se presenten a trabajar.

El Gobierno volverá a tener que licitar todas sus compras, por más urgentes que sean.

También se podrá circular libremente en el país, ya que no hay un marco legal que obligue a cumplir con la cuarentena.

El país volverá a tener solamente recomendaciones hasta que los puntos originados ayer se resuelvan.

En tanto, el virus amenaza y siguen sumando víctimas ante la mirada incrédula de la población que exige que se tengan medidas, pero que una parte se niega a cumplirlas voluntariamente.