Un estudio de Oxfam y la Fundación para el Desarrollo de Centroamérica (Fudecen) revela que las 110 personas más acomodadas de El Salvador tienen una fortuna de $8,900 millones, mientras 2.1 millones de personas viven con carencias como falta de agua potable, inseguridad alimentaria o rezago educativo.

En el informe "Ni un paso atrás. Cerremos las brechas de desigualdad multidimensional en El Salvador", Oxfam y Fudecen advierten que buena parte de la riqueza del país está en manos de unos pocos.

Según datos de la consultora estadounidense Wealth-X, citados en el informe, entre 2015 y 2019, el número de personas ultra ricas en El Salvador, es decir, con un patrimonio neto superior a los $5 millones, aumentó de 100 a 110. Cada año aparecieron dos nuevos ultra ricos, indicó Óscar Cabrera, presidente de Fudecen.

Estas 110 personas acumulan una fortuna de $8,900 millones, lo que supera el presupuesto general de la nación para 2021, que es de $7,423 millones. Según Wealth-X, solo la persona más acaudalada del país posee $5,300 millones, suficiente para financiar los $3,622 millones aprobados en el presupuesto de este año para desarrollo social.

En el otro extremo está la pobreza "que no solo se expresa en términos de ingresos", indicó Cabrera. La encuesta de hogares de 2019 estima que 2.1 millones de personas son pobres multidimensionales, es decir, enfrentan siete o más privaciones en educación, condiciones de su vivienda, trabajo y seguridad social, salud y seguridad alimentaria, y calidad del hábitat.

Según la encuesta, el 77 % de los hogares salvadoreños reporta una baja educación entre los adultos y el 61.3 % tiene al menos un integrante en condiciones de subempleo o de inestabilidad en el trabajo. El 40.5 % vive en hacinamiento, el 42.8 % enfrenta restricciones debido a la inseguridad ciudadana, el 19.6 %no tiene acceso a agua potable y el 16 % enfrenta inseguridad alimentaria.

Pero las carencias se ensañan más con las mujeres y la población en la zona rural, destaca el estudio de Oxfam y Fudecen. Las mujeres ganan en promedio $67.3 menos que los hombres. El estudio estima que, a diario, un promedio de 16 mujeres enfrentan una o más agresiones sexuales.

"Hoy por hoy, para los hogares de más bajos ingresos, ser mujer y vivir en el área rural, determina un futuro con pocas posibilidades de completar la educación media y mucho menos la educación superior", indicó Cabrera.

Tras la presentación del informe, Oxfam y Fudecen organizaron un panel de discusión virtual para discutir su propuesta de pacto social para cerrar las brechas de desigualdad.

Leonor Selva, directora ejecutiva de la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP), dijo en su intervención que se debe "poner nombre y apellidos al concepto de élites y de poderes fácticos, porque son conceptos tan dispersos (...) que, si no empezamos a ponerle nombre, nunca vamos a realmente atacar el problema de fondo y por el contrario se vuelve un discurso en donde cabemos todos o nadie".

La vocera de ANEP sostuvo que el sector privado considera importante un pacto social porque la desigualdad genera inestabilidad social y política, abre los portillos al populismo y la corrupción; condiciones que no benefician al clima de negocios.

Por La Prensa Grafica