BRASIL, Ceará-. 51 personas fueron asesinadas en sólo dos días en medio de una enorme huelga policial en el interior de Brasil. La situación se da en el estado de Ceará, al nordeste del país. Los policías están amotinados exigiendo aumentos salariales, a pesar de que la ley no les permite realizar un paro. Ante este panorama, el gobierno dispuso el envío de las Fuerzas Armadas.

El reclamo policial comenzó en la mañana del 19 de febrero. En ese momento, entró en vigencia la restricción de tareas impuesta por la Policía Civil ante la falta de acuerdo con las autoridades de Ceará. El gobernador de ese Estado es Camilo Santana, del opositor Partido de los Trabajadores. Cerca de 300 efectivos participan de la rebelión y fueron ya sancionados por la insurrección.

La protesta ha generado un clima de violencia extrema. El propio hermano del excandidato presidencial Ciro Gomes la padeció, al quedar herido luego de ser disparado cuando intentaba ingresar a un cuartel. Este dirigente, actual senador por ese estado, se encuentra internado pero su vida no corre peligro. Asimismo, distintos videos muestran a encapuchados arrojar piedras contra patrulleros que intentaban salir a cumplir sus tareas.

Hasta este viernes 21 de febrero, no había atisbo de mejoras. Para ese momento, los fallecidos sumaban 51 solamente desde que comenzó la huelga policial. Por esta situación, el presidente Jair Bolsonaro ordenó el arribo de las Fuerzas Armadas a través de un decreto. Los militares tendrán la función de “resguardar la seguridad” y permanecerán durante una semana.

 “Esto es algo serio. Si nos encontramos en una guerra urbana, tenemos que enviar tropas para resolver ese problema”, señaló el jefe de Estado. La medida fue criticada, no obstante, por los opositores, que temen que se generen más muertos. El excapitán del Ejército brasileño viene de indultar a gran cantidad de jefes militares para fin de 2019, como informó El Intransigente América.

Por: El Intransigente América News