El presidente de la república, Nayib Bukele, informó el pasado 18 de junio cuáles serían los lineamientos para combatir la delincuencia y la operatividad de las pandillas en El Salvador.

Ante esto  Guillermo Gallegos, diputado de Gana mostró su satisfacción con los resultados obtenidos desde que inicio el plan de seguridad y confirmó este lunes que ha solicitado a la Asamblea Legislativa una declaratoria de guerra en contra de las pandillas para apoyar los planes seguridad impulsados por el nuevo Gobierno.

"Haciendo un estudio de la Constitución, hay una posibilidad en que el Estado puede declarar la guerra a través de la Asamblea Legislativa. Y esto significa poder tener todos los recursos disponibles por parte del Ejecutivo para poder terminar con este mal. Esto no va a suceder de la noche a la mañana, esto lleva un tiempo, un procedimiento", dijo el diputado.

El parlamentario explicó que la iniciativa busca que el Estado ampare tanto a policías como soldados cuando sea necesario enfrentar a los miembros de estos grupos criminales. Al ser cuestionado si esta medida podría provocar abuso de autoridad en algunos casos,  apuntó sin dar mayores detalles que hay un Estado de Derecho que respetar.

Agrego “Yo siempre he dicho, a mí me importa más la vida de un policía que la de un marero, yo estoy claro, y si en un momento determinado el policía tiene que defenderse y asesinar un marero, no es primera vez que vamos a hacer esfuerzos para defenderlo y que pueda salir limpio".

Tras estas declaraciones, el parlamentario pecenista, Antonio Almendáriz, se muestra en desacuerdo con la propuesta de declararles la guerra a las pandillas. Asegura que ni durante la guerra civil se emitió tal declaratoria.

Esta iniciativa también ha sido criticada por el Instituto de Derechos Humanos de la UCA que la ha considerado como una "barrabasada ética", ya que contraviene las convenciones internacionales de derechos humanos en El Salvador.