La Unidad Especializada Antihomicidios de la Fiscalía General de la República giró 10 órdenes de captura en contra de siete agentes policiales y tres civiles, incluyendo al ex jefe del GRP,  Julio César Flores Castro involucrados en la desaparición de la agente Carla Mayari Ayala a manos del agente Juan Josué Castillo luego de haber asistido a una fiesta en el extinto Grupo de Reacción Policial (GRP) el 29 de diciembre del año pasado.

A los imputados se les acusa de los delitos de  Feminicidio Agravado, Encubrimiento, Incumplimiento de Deberes y Complicidad en el caso de la agente Ayala. Flores Castro fue capturado el sábado pasado y llevado a la División Antinarcóticos de la PNC.

El director de la Policía Nacional Civil (PNC), Howard Cotto, informó que las capturas empezaron ayer, domingo, pero la operación empezó el viernes por la tarde aunque aún está pendiente la del principal sospechoso, Castillo Arévalo (Samurai).

Aseguró que “hace días” un agente de la PNC y un civil fueron detenido en Estados Unidos, pero no se había hecho pública la captura para evitar problemas con los otros arrestos.

Carla Mayarí Ayala, agente de la PNC, desaparecida por agentes del Grupo de Reacción Policial desde el 29 de diciembre de 2017.

Cotto aseguró que con las investigaciones se ha determinado que la agente Ayala podría haberse salvador, aunque también investigan la posibilidad que haya muerto minutos después de ser atacada.

“A esta altura ya tenemos bastante claro cuál ha sido el recorrido (de la patrulla involucrada), por medio de cámaras y pericias. Hay detalles que se han definido por las reconstrucciones”, dijo Cotto en la entrevista radial de Pencho y Aída.

Cotto dijo que tienen un video que sustituye una de las reconstrucciones porque sirve para contrastar las declaraciones de uno de los imputados.

El pasado 27 de abril el Tribunal Disciplinario Metropolitano de la Policía Nacional Civil ordenó que el subcomisionado Julio César Flores Castro, exsubjefe del extinto Grupo de Reacción Policial (GRP) fuera separado de forma indefinida del cargo de subjefe que ocupaba en la Delegación de Soyapango como medida preventiva en la investigación que se sigue por la desaparición de la agente Carla Ayala.

Además de Flores Castro, trascendió, un sargento y un agente fueron removidos de sus cargos sin goce de sueldo por la misma razón.

La Inspectoría General de la Policía inició este proceso y en la investigación encontró suficientes evidencias para solicitar esa medida al tribunal, afirmó el secretario del Movimiento de Trabajadores de la Policía (MTP), Marvin Reyes.

La medida implica que el oficial y los agentes además deben entregar su arma, uniformes y otros artículos propios de la institución.