Los efectos de la covid-19 golpean duramente la economía de un sinfín de pequeñas empresas, más aún si vende en las calles cómo Katherine Reyes una emprendedora migueleña qué ha reinstalado su pequeño negocio de venta de jugos el barrio La Merced sobre la séptima Avenida Sur, asegura que el negocio no es tan rentable Como algunos meses, pero debe sacar adelante a su familia.

“Cuando comenzó el coronavirus tenía mucho miedo de salir a vender, pero tenemos que aprender a vivir con el virus y sacar adelante nuestra familia por eso hay que hacer uso de la mascarilla y alcohol gel siempre cuando va dinero o antes de atender” manifestó Katherine.

Mantener su negocio que de a poco ha ido creciendo aseguro es su mayor reto y confía en que la población ayudará a cumplirlo “durante 3 años he vendido acá jugos de zanahoria, naranja y apio. Antes vendía para una señora, de a poco fui ahorrando y logré comprar mis propias máquinas, mi mesa para poner este pues, aunque con el covid19 la gente tiene un poco de desconfianza de comprar en la calle, pero gracias a Dios siempre se vende, aunque sea poco”.

Trabajadores, optimistas y perseverantes son cualidades que describen a un Salvadoreño Manuel Rivera también es uno de los miles que día con día salen a las calles a ganarse a laborar. La venta de quesadillas es su sustento “pues ni modo toca salir a vender, pero siempre con la Fé en el de arriba que todo saldrá bien”.

El joven recorre varias cuadras de la perla oriental con una charola ofreciendo quesadillas artesanales, a pesar de la situación actual por la covid-19 sigue adelante pues debe mantenerse su familia.

Tras el paso de la cuarentena El Salvador reciente una de las economías más afectadas en la región centroamericana negocios como el de katherine o el de Manuel esperan que la población les eche la mano para no ser parte de una larga lista de desempleados.