El presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani, mandó este viernes una carta al presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, en la que denuncia la situación de “presión y acoso” en la que se hallan un grupo de opositores y presos del régimen con los que se reunió una delegación de la institución comunitaria. En la misiva, Tajani se queja enérgicamente al considerar que el gobierno nicaragüense faltó a “la palabra dada” de que ninguna de esas personas sufriría “represalias” y califica de “intolerables” las acusaciones de que la Eurocámara forme parte “de un complot para provocar un golpe de Estado en Nicaragua”. El presidente del Parlamento le anuncia, además, de que en caso de que su “régimen” no deje de acosar a la sociedad civil y a la oposición “habrá muy pronto medidas”.
Hace dos semanas, una delegación de eurodiputados, entre los cuales estaba el socialista Ramón Jáuregui, viajó a Nicaragua. “Visitamos cárceles donde los prisioneros políticos están sufriendo un maltrato horrible. Hay una quiebra de las libertades democráticas en ese país. Y aunque el presidente Ortega prometió a la delegación del Parlamento Europeo que haría algo para suavizar la situación de la quiebra de la democracia y de la democracia de los derechos humanos de ese país, nada está ocurriendo. Todo va a peor”, denunció esta semana Jáuregui en el pleno del Parlamento en Estrasburgo.
El eurodiputado instó entonces a Tajani a mandar una carta de protesta a Ortega. En ella, el presidente del Parlamento Europeo transmite que la delegación pudo llevar a cabo su “agenda sin interferencias”, pero denuncia que el gobierno vulneró las “garantías ofrecidas” para las personas con quien se iban a entrevistas. “Hemos tenido noticia fehaciente de que varias de las activistas presas que la delegación europea visitó en prisión de mujeres de La Esperanza han sido violentadas”. Entre ellas cita a Jeysi Lagos, cuyo paradero dice que “al parecer se desconoce”. Además, otros dos opositores en prisión, según Tajani, han sido trasladados a otros centros penitenciarios “en condiciones mucho peores”. Se trata de los periodistas Miguel Mora y Lucía Pineda, director y jefa de información del Canal 100% Noticias, clausurado por el régimen en diciembre. También las organizaciones y activistas con los que se entrevistaron han visto cómo la presión hacia ellos se ha endurecido.
