Decenas de miles de personas abandonan este miércoles el litoral de Texas y Louisiana ante la amenaza de “catastróficas” inundaciones que podría causar en las próximas horas del huracán de categoría 4 Laura, que se aproximará a la costa con vientos de cerca de 145 millas por hora (230 km/h).

Una de las áreas pronosticadas para recibir el mayor impacto de los vientos huracanados de Laura es la ciudad de Lake Charles (Louisiana), uno de los centros industriales más importantes del estado y de la región, ubicado en la franja costera al este del estado y fronteriza con Texas.

Los meteorólogos indicaron que Laura causará marejadas ciclónicas “imposibles de sobrevivir”, con olas “destructivas” que asolarán zonas de Texas y Louisiana.

Otros de los grandes peligros son, según la agencia estadounidense, los “vientos extremos e inundaciones repentinas”, por lo que advirtió que sólo quedan “pocas horas para proteger la vida y las propiedades” de los residentes de la zona.