Honduras: barricadas frente al "fraude" electoral

En Honduras, las calles están literalmente en llamas. El Ejército ha desalojado a cientos de manifestantes de la oposición que bloquearon con piedras, ramas y neumáticos incendiados las principales carreteras del país, así como los accesos a la capital, Tegucigalpa, para denunciar el presunto fraude en los comicios del 26 de noviembre.

Las protestas no decaen, mientras el Tribunal Electoral, que anunció la victoria del presidente saliente Juan Orlando Hernández con una ventaja mínima frente a Salvador Nasralla, analiza las impugnaciones presentadas por la oposición.

"Se quiere reelegir Juan Orlando Hernández porque nuestro presidente, que el pueblo ha elegido, es Salvador Nasralla (...) Continuamos todo este mes luchando en las calles, en barrios, en barricadas, por todos los lugares, en diferentes ciudades del país", dice un manifestante.

Durante el recuento, se desataron violentos enfrentamientos que dejaron una docena de muertos y las autoridades declararon el toque de queda en todo el país.

La misión de observadores de la Organización de Estados Americanos ha constatado "irregularidades, errores y problemas sistémicos", que "no permiten tener certeza sobre los resultados". Human Right Watch también ha denunciado "indicios contundentes de fraude electoral".