Después de ser nombrada como la ejemplar Dinamarca paso a convertirse en uno de los países con más violencia sexual

Dinamarca fue uno de los primeros países en adherirse al Convenio del Consejo de Europa sobre prevención y lucha contra la violencia contra las mujeres y la violencia doméstica (el Convenio de Estambul), un tratado internacional que busca combatir la violencia contra las mujeres en todo el mundo.

Después de ser nombrada como la ejemplar Dinamarca paso a convertirse en uno de los países con más violencia sexual

En 2017, Dinamarca fue nombrada como el segundo mejor país de la Unión Europea (UE) en términos de igualdad de género, solo superada por su vecina Suecia.

Fue uno de los nueve países en alcanzar los objetivos de cuidado infantil de la UE, tuvo una de las posturas de mayor igualdad de género en cuanto al trabajo doméstico y fue uno de los pocos países europeos cercanos a lograr un parlamento con representación 50%/50% de hombres y mujeres, según el Índice de Igualdad de Género.

Pero en un informe publicado la semana pasada, Amnistía Internacional advirtió que Dinamarca también tiene una "cultura de violación" generalizada y problemas sistémicos en la forma en que aborda este tipo de casos.

Varios estudios dicen que Dinamarca tiene la mayor prevalencia de violencia sexual en Europa.

El Ministerio de Justicia de Dinamarca estima que alrededor de 5.100 mujeres al año son víctimas de violación o intento de violación, mientras que la Universidad del Sur de Dinamarca elevó esta cifra en el año 2017 a 24.000, un número alto para un país con una población relativamente pequeña (5,8 millones).

Ese mismo año, solo 890 violaciones fueron denunciadas a la policía, de las cuales 535 fueron procesadas y 94 terminaron en condenas.

En declaraciones a Amnistía Internacional, varias víctimas dijeron que a menudo encontraban que "el proceso de presentación de informes y sus consecuencias fueron enormemente traumatizantes", ya fuera porque no se les creyó, por cómo fueron interrogadas por los oficiales o, en uno de los casos, porque pruebas importantes que luego se necesitaron en el juicio no fueron debidamente recogidas.

La Policía Nacional de Dinamarca le dijo a la BBC que se esfuerzan por mejorar la forma en que tratan a las personas que denuncian violaciones y que están trabajando en las nuevas directrices que se elaboraron en 2016.

Entonces ¿cómo un país con un impresionante historial de igualdad de género terminó siendo nombrado uno de los peores del continente en cuanto a violencia contra las mujeres?

Algunos creen que la imagen del país escandinavo como un lugar utópicamente progresista se ha sumado al problema.

"Tenemos esta idea general de que ya hemos logrado la igualdad de género en Dinamarca, que la lucha ha terminado y que no queda nada por lo que luchar", le dice a la BBC Helena Gleesborg Hansen, vicepresidenta de la Sociedad de Mujeres Danesas.

"Y ese es el mayor obstáculo que vemos cuando hablamos de igualdad de género".

Dinamarca fue uno de los primeros países en adherirse al Convenio del Consejo de Europa sobre prevención y lucha contra la violencia contra las mujeres y la violencia doméstica (el Convenio de Estambul), un tratado internacional que busca combatir la violencia contra las mujeres en todo el mundo.

Pero a pesar de que Dinamarca pronto se sumó a la iniciativa, Grevio, el grupo establecido para monitorear si los países están implementando correctamente el convenio, advirtió en 2017 que aún le faltaba trabajo por hacer.

Un tema fundamental, dijo el grupo, es la definición de "violación" de acuerdo a la ley danesa.

De manera crucial, la ley define la violación como la fuerza o la amenaza de violencia, dejando a un lado si hubo o no consentimiento.

Por esta razón, las Directrices de la Policía Nacional Danesa dicen que los agentes deben preguntar a los denunciantes de violaciones sobre la "resistencia al autor", es decir, si intentaron o no pelear físicamente contra ellos.

Pero el consentimiento, dijo Grevio en su informe, "es el elemento central en que el Convenio de Estambul enmarca la violencia sexual".

Hansen, de la Sociedad de Mujeres Danesas, dice que la ley actual atribuye a la víctima la responsabilidad de no ser violada, en lugar de que el autor no cometa el acto. Y esto, a su vez, conduce a una actitud generalizada de culpabilizar a la víctima.

Después de ser nombrada como la ejemplar Dinamarca paso a convertirse en uno de los países con más violencia sexual