La visita del presidente surcoreano Moon Jae-in a su vecino del norte ha sido una de las más productivas de los últimos tiempos. Moon escaló junto a su homólogo Kim Jong-un el monte Paektu, un lugar sagrado para los coreanos de ambos lados del paralelo 38.

Un acontecimiento simbólico, como simbólico fue el discurso de Moon ante unos 10.000 norcoreanos durante un importante evento deportivo. El primer líder surcoreano en hacer algo parecido.

Kim sorprendió incluso asegurando que está dispuesto a cerrar la instalación de pruebas balísticas y nucleares de Yongbyon a cambio de contrapartidas de Washington. Algo que obviamente ha despertado el interés de Estados Unidos, que ve una puerta abierta a la desnuclearización de Corea del Norte de aquí a 2021.

Otro paso dado por Kim ha sido el anuncio de que las instalaciones balísticas de Tongchang-ri serán clausuradas definitivamente en presencia de observadores internacionales.

En pos de un avance para la unificación de las dos coreas, que cada vez es mejor visto en el norte, Kim ha aceptado visitar próximamente Seúl.